viernes, 19 de febrero de 2010

Carta de la Fundación María Ayuda España






 Aquí tenéis una copia de la carta de agradecimiento que han mandado desde la Fundación


Queridos amigos

Nos dirigimos a vosotros para daros las gracias por el pequeño milagro que
nos habéis ayudado a conseguir. Nuestro querido Kagabo, que ya es parte de
vuestras familias, salió del hospital el pasado jueves 11 de febrero (el
día de la Virgen de Lourdes) y ya está en casa, gracias a la Mater, al
doctor De las Heras, a Joaquín Zuazo y a todos vosotros, por vuestros
rezos y vuestra generosa colaboración. Sin vosotros, el doctor De las
Heras no hubiera podido volar a Burundi y salvar a Kagabo. GRACIAS.

La noticia nos llena a todos de ilusión y la felicidad, y creemos que una
de las formas más bonitas de expresaros nuestra gratitud es informaros de
su situación.

Como sabéis, Kagabo enfermó a principios de enero. Su familia llamó a
Joaquín en Navidad, diciendo que no veía. Y fue el principio de un largo
periplo, de idas y venidas del hospital, de distintos diagnósticos y
medicaciones, pero el pobre Kagabo no mejoraba. Tras varias pruebas y
hospitalizaciones, se le hizo un scanner a Kagabo y se descubrió la
necesidad de hacer un drenaje, algo que los médicos de Burundi decían que
no podían hacer.

Pero Joaquín no perdió la esperanza, los abrazos de Kagabo y sus ganas de
vivir se lo impedían. Y conocéis a Joaquín, que con la ayuda de la Mater,
es capaz de todo. Comenzó una campaña por mail para buscar a un médico
neurólogo que fuera a Burundi a operar a Kagabo. Y la gente como vosotros
empezó a contestar, a interesarse y a hacer correr la noticia. Hasta que
apareció el doctor Pedro De las Heras, que en 24 horas llegó a a Burundi y
al día siguiente llevó a cabo la operación.

Kagabo, gracias a sus ganas de vivir, a las oraciones y la maestría del
doctor, sobrevivió a la operación y en los siguientes días fue
evolucionado favorablemente, Hasta que a las pocas semanas, por fin, ya
está de vuelta en casa.

Kagabo ha superado la primera etapa de un largo camino, tiene que hacer
rehabilitación 3 veces por semana y aún no mueve el brazo derecho,
necesita ayuda para todo. Aunque todavía no se vale por si solo, todos los
otros niños le están ayudando a recuperarse. Por eso era tan importante
que volviera a casa, porque el apoyo, las miradas y las risas de los otros
niños son el mejor de los estímulos.

Como lo es la ayuda de la Mater. Sólo contaros que en el hospital corría
el rumor que Kagabo se había salvado por que era un "Niño de María", que
es como se denominan a sí mismos los niños cuando desde la Fundación
Mariya Arafasha empiezan a trabajar con ellos. Dejan de ser niños de la
calle, para ser "Niños de María". Porque ella se va a ocupar de ellos, a
cuidarles y a educarles.

Joaquín ha vivido muchos momentos significativos en los dos años que lleva
en Burundi, pero la sonrisa de Kagabo ese día es uno de los más emotivos
de ellos. Os invitamos a ver esa sonrisa en vivo, en la web de María Ayuda
(www.mariaayuda.es) y en el blog de Joaquín.

A todos vosotros, GRACIAS DE CORAZÓN, por ayudarnos a darle una segunda
oportunidad a Kagabo, por ayudar a que un sueño, un milagro, se haga
realidad. Gracias por acompañarnos en este camino día a día.


FUNDACION MARIA AYUDA, ESPAÑA
FUNDACION MARIYA ARAFASHA, BURUNDI




1 comentario:

  1. La FE mueve montañas. La experiencia vivida en Burundi y la sonrisa de Kagabo me animan a seguir en esta profesíón que no por muy tecnificada, debe de olvidar que los pricipios de entrega y servicio están ahí, y por siempre. Qué gran placer, y gracias a todos

    Pedro

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